Estudios recientes han confirmado lo que ya se había intuido en los últimos años: la formación se ha transformado en una tendencia en las empresas de hoy día. Poco a poco más compañías se van sumando a la idea de ofrecer formación humana a sus empleados y directivos con la intención de tener trabajadores mejor preparados y más capacitados para afrontar cualquier tipo de reto con el cual se encuentren. En los próximos años se estima que continuará siendo un tema de importancia al alza, lo que se reflejará en que cada vez habrá más profesionales mejor formados. ¿Pero cuáles son las tendencias que se están registrando?
Formación humana multidisciplinar
En los últimos años han cambiado mucho las técnicas de formación en las empresas. La metódica clásica se trataba de potenciar los conocimientos y la preparación de un trabajador para que fuera más útil en el puesto en el cual se hubiera establecido. Si se trataba de un informático el plan de formación se establecería alrededor de la intención de que perfeccionara sus dotes con software desconocido o con herramientas vinculadas directamente con los ordenadores. Y si se trataba de un intérprete, la formación elegida para él consistiría en mejorar su catálogo de idiomas aprendidos para ser más eficaz en ese sentido.
Pero hoy día la formación humana es multidisciplinar, lo que significa que no hay límites y que se busca tener empleados más capaces de defenderse en todo tipo de contextos. Esto implica que al empleado informático se le proporcionará la oportunidad de asistir a un curso de formación que le permita aprender inglés, mientras que a un intérprete no se le instruirá en otro idioma, sino que tendrá la posibilidad de aprender informática y uso de software. De esta manera se tendrá un equipo más refrescante, mejor preparado y cuyo potencial sea aprovechado más allá de los conocimientos personales que tengan sobre una materia.
Con esto, por otra parte, se saca a los trabajadores de las áreas de confort en las que se sienten tranquilos, lo que lleva a que una situación como esta resulte muy beneficiosa para sus carreras. Al mismo tiempo, estos empleados pueden descubrir habilidades innatas ocultas que hasta ese momento no habían tenido la ocasión de liberar, pero con las que es posible que lleguen muy lejos si se les proporciona confianza y apoyo.
Áreas más solicitadas
Con la formación avanzando a zancadas en el entorno de las empresas se puede comprobar cómo algunos temas en especial ganan una mayor relevancia. Una de las principales preocupaciones está relacionada con la formación en dirección y gestión de equipos de trabajo. Más y más personas desean saber cómo se tienen que desenvolver para poder disfrutar de un entorno adecuado en el cual todos los profesionales que lo forman se encuentren satisfechos y receptivos a incrementar su productividad. Con este tipo de formación se hacen méritos para recibir ascensos y seguro que es algo que a más de un empleado también le interesa.
Otro de los temas que cuentan con una amplia solicitud son la prevención de riesgos laborales y los idiomas. En ambos casos se percibe que los trabajadores optan por procesos de formación que tienen en cuenta que no solo se verán beneficiados ellos por sus nuevos conocimientos, sino que también ayudarán a las empresas con las que trabajan, algo siempre positivo bajo todos los conceptos. Saber cómo actuar ante los riesgos laborales que se puedan producir en la oficina evitará problemas inesperados y ayudará a destacar como un individuo de peso en la plantilla.
Por su lado, los idiomas son ya una referencia, sobre todo el inglés. Los empleados que no tengan mucha confianza en su inglés tendrán la oportunidad de reforzarlo de esta forma, pero en muchos casos en los que este idioma ya está dominado lo que se hace es optar por otro idioma de gran popularidad. Varios idiomas de Asia, como el chino y el coreano han dado un salto importante en la lista de prioridades mundiales. Por eso no está de más que los empleados se puedan defender en estos idiomas, al menos para cubrir los mínimos de conversación si llegara a producirse algún tipo de encuentro internacional. Son temas que no importa aprender, porque antes o después, el inglés se acabará utilizando.
¿Y cómo se implementarán estas nuevas inquietudes?
Sabemos, por lo tanto, que son numerosos los temas y aspectos que van a buscar ser reforzados en las empresas en los próximos meses. ¿Pero cómo se llevará a cabo la impartición de estos conocimientos? ¿Cuáles son realmente las tendencias en términos de métodos de formación humana? Las metodologías por las que se apostará se dividen en cinco grandes grupos: presencial, online, uso de medios tecnológicos, gamificación y coaching o mentoring. Estos cinco pilares, algunos de ellos ya populares en las empresas, van a acaparar la mayor parte de la atención de las empresas. En especial se espera que el grueso de la inversión en formación lo agrupen la presencial, la online y la que se basará en el uso de nuevos medios tecnológicos. Pero al mismo tiempo poco a poco se va viendo cómo la gamificación despierta más interés entre las compañías, así como el apoyo que se proporciona a través del coaching.
La formación presencial y online ha alcanzado un estado de maduración elevado y no resulta extraño ver cómo se implementa en todo tipo de negocios. Cada vez los métodos buscan ser más especializados y optimizar el tiempo de los empleados para que puedan disfrutar de la formación sin que repercuta de una manera negativa en sus jornadas de trabajo. En el aspecto online se está fomentando el uso de los MOOCs (Massive Open Online Course) debido a su flexibilidad y gran serie de posibilidades al permitir el acceso masivo de miles de estudiantes.
Donde también hay mucho margen de mejora es en el uso de medios tecnológicos. Cada vez se apuesta por llevar la formación a una mayor cantidad de terminales, alejándose de los recursos clásicos, como los ordenadores, para estar presentes también en dispositivos móviles o incluso en relojes inteligentes. De esta manera los profesionales pueden llevar la formación a cualquier lugar y tenerla presente en aquellos ratos libres que tienen y que pueden dedicar a repasar o realizar pruebas.
La gamificación apunta alto y se está viendo como una excelente forma de que los profesionales sientan más interés por el aprendizaje. Desde niños se han utilizado métodos de aprendizaje didácticos y divertidos, pero hasta hace poco tiempo eran sistemas que no se aplicaban entre los adultos. Al gamificar un curso se crea mayor interés entre quienes participan en el mismo, que tendrán un desafío ante sí y el interés en trabajar duro para alcanzar metas que les produzcan un alto nivel de satisfacción.
No menos relevante, aunque con menor crecimiento, será el coaching y mentoring, que está confirmándose año tras año como una tendencia de formación humana que también aporta aspectos positivos a los empleados que necesitan una guía que les acompañe en el uso de su máximo potencial.
