Gloria del Río, con 18 años de experiencia en Grupo P&A, se ha consolidado como una de las piezas clave de la empresa. Su amplia experiencia en el ámbito de los recursos humanos le ha permitido obtener una visión integral del negocio, lo que le ha llevado a ocupar un puesto como directora de cuentas. Desde hace 5 años, se dedica a atender las necesidades de los clientes, ofreciéndoles respuestas personalizadas y abordando sus inquietudes con un enfoque cercano y profesional.
Hoy, os la presentamos a través de una entrevista en la que se abre con todos vosotros para que podáis conocerla mejor y entender su valiosa función dentro de la empresa.
¿Cuándo y cómo inicias tu andadura profesional en P&A?
En 2007, recibí la invitación de P&A para unirme al departamento de selección. Ya conocía la empresa, su cultura y a su fundador, Pablo Riera, lo que despertó en mí un gran interés por conocer más a fondo el desarrollo del proyecto. Descubrir el equipo de profesionales que formaba parte de él, los productos y servicios que ofrecían, así como los clientes con los que colaboraban, aumentó aún más mi curiosidad. Vi en esta oportunidad un desafío profesional sumamente atractivo, por lo que no dudé en unirme.
¿Desde cuándo lideras el departamento de selección como responsable de área?
El año 2020 marcó un punto de inflexión en muchos aspectos. La pandemia del Covid-19 y el fallecimiento del fundador de P&A trajeron consigo grandes cambios organizativos dentro del grupo. Fue en ese contexto cuando se me ofreció la oportunidad de asumir la dirección del departamento. Sin duda, fue una experiencia profundamente enriquecedora para mí.
Asimismo, también ocupas una posición en el equipo como directora de cuentas, ¿cómo defines tu rol en este ámbito?
Impulsada por los cambios de 2020, no solo se me ofreció la responsabilidad de dirigir el departamento de selección y formar un nuevo equipo, sino que también asumí el rol de directora de cuenta dentro de Grupo P&A. En esta posición, la función principal del director de cuenta es ser la voz del cliente, atendiendo sus necesidades de manera integral. Esto no se limita únicamente a selección, sino que abarca áreas como desarrollo, formación, liderazgo y cualquier otra necesidad que surja para los empleados.
¿Cómo equilibras tus dos roles dentro de la empresa, como responsable de selección y directora de cuentas?
Equilibrar ambos roles requiere una excelente organización y gestión del tiempo. Es crucial mantener el enfoque en la estrategia de selección y en la dirección del equipo, a la vez que se identifican oportunidades de negocio sin sacrificar la calidad. Por ello, considero la organización y la gestión del tiempo como elementos clave para lograr este equilibrio. Además, contar con un equipo sólido y de confianza me permite delegar y distribuir responsabilidades de manera efectiva. Esto no solo optimiza el tiempo, sino que también fomenta el crecimiento y la autonomía del equipo.
¿Cuál es tu enfoque estratégico para garantizar que cada cuenta reciba el nivel adecuado de atención y recursos?
Me centro en estar cerca del cliente, realizando un seguimiento continuo y proporcionando los recursos necesarios a los departamentos implicados para garantizar una atención adecuada de las cuentas. Doy gran importancia a la calidad, por lo que me enfoco en identificar oportunidades de mejora y asegurarme de que el cliente se sienta acompañado y comprendido en todo momento. Para mí, ofrecer calidad al cliente no es posible sin el apoyo del equipo. Contar con un equipo sólido y alineado con la estrategia es esencial para ofrecer un servicio de alto nivel.
¿Cómo crees que tu experiencia en el área de selección complementa tu trabajo como directora de cuentas?
Mi experiencia de más de 18 años en el departamento de selección me ha permitido adquirir un profundo conocimiento del mercado laboral, de los profesionales y de la cultura organizacional. Esta experiencia me ha proporcionado una visión integral del negocio y de las necesidades específicas de las empresas, lo que considero esencial para ofrecer soluciones efectivas.
¿Qué tipo de producto o servicio es el que más demandan tus cuentas?
Los clientes exigen cada vez un reclutamiento altamente especializado, especialmente en el ámbito del Headhunting, donde buscamos perfiles estratégicos y de liderazgo para las organizaciones. Además, crece la necesidad de evaluar competencias para identificar talento, tanto con el objetivo de promover a empleados actuales como para detectar el potencial de futuros líderes. Por otro lado, la formación y el desarrollo de habilidades blandas (Soft Skills) se están consolidando como una prioridad, particularmente a través de programas como Extraordinary Leader y el coaching, que contribuyen a fortalecer el liderazgo y mejorar el rendimiento organizacional.
¿Cuál ha sido tu mayor reto profesional desde que entraste a formar parte de Grupo P&A?
Soy una persona a la que le motivan los retos, por lo que no podría quedarme solo con uno. Sin embargo, algunos de los más destacados a lo largo de mi carrera han sido los siguientes.
Uno de los retos más importantes fue el año 2020, cuando asumí la dirección del departamento de selección y, simultáneamente, me acerqué a los clientes para ofrecerles nuevos productos de desarrollo y liderazgo. Este desafío fue significativo, pero también muy enriquecedor, ya que me permitió ampliar mis responsabilidades y aportar valor estratégico en un contexto cambiante.
Otro momento clave fue durante la crisis 2008/2010, un período de gran incertidumbre en el mercado laboral. En ese tiempo, el área de selección se enfrentó a enormes desafíos, especialmente con nuestros productos de outplacement. A pesar de la complejidad, supimos adaptarnos rápidamente a las nuevas demandas del mercado y seguir brindando soluciones efectivas.
Finalmente, uno de los retos más relevantes de mi carrera fue unirme a Grupo P&A, donde tuve la oportunidad de aprender una nueva profesión en el ámbito de selección y headhunting. Si bien en mi empresa anterior ya tenía experiencia con el tejido empresarial gallego, este nuevo rol me impulsó a dar un paso más integrando análisis estratégico, intuición y enfoque consultivo en mi día a día. Fue un cambio significativo que, a pesar de su complejidad, me permitió crecer enormemente, dedicando muchas horas a formarme y conocer a nuevos profesionales. Sin duda, esta experiencia enriqueció mi carrera y amplió mis horizontes.
